Han pasado 487 años desde que se fundó la capital del Valle del Cauca, la más bella de las bailarinas, tierra de frutas, coloridas aves, civismo y cuna de siete ríos. Se trata de una de las ciudades más antiguas del continente americano y de Colombia. Una ciudad que a lo largo de estos 487 años pasó de ser una tranquila villa de haciendas y cultivos de caña de azúcar a la capital de un departamento, de la salsa, distrito especial y sede de algunos de los eventos más importantes del país, y todo esto merece una celebración.
¡Feliz cumpleaños Cali!
A lo largo de estos más de 400 años, la Sultana del Valle ha sido musa de artistas, ha recibido innumerables reconocimientos y ha sido sede de importantes eventos a nivel mundial. Algunos de los más distinguidos han sido:
En 2022, fue nombrada ‘Destino Ciudad Cultural Líder de Sudamérica’ en los premios World Travel Awards
En julio del mismo año la salsa caleña fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación.
En 2021 fue sede de los I Juegos Panamericanos Junior.
En 2015 fue sede del Mundial de atletismo de menores de la IAAF.
En 2014 fue sede del Mundial de ciclismo en pista UCI.
En 2014 fue sede de los IX Juegos Mundiales.
En 1971 fue sede de los VI Juegos Panamericanos.
Algo que no muchas personas saben es que Cali, a lo largo de su historia, ha recibido también una cantidad importante de regalos de parte de personas, artistas o comunidades que se dejaron cautivar por esta ciudad amable, cálida y única.
A continuación les compartimos los 5 regalos más insólitos que ha recibido Cali en sus 487 años de historia:
1) Una fuente:
La fuente libanesa de Cali, fue regalada a la ciudad por la comunidad libanesa en 1971 por ocasión de los VI Juegos Panamericanos. Esta fuente luminosa da inicio a la Avenida de las Américas o la Avenida Tercera Norte, la cual estaba adornada en su separador central por las banderas de 33 países de América.
Tomada de https://twitter.com/CaliesCaliCOL/status/1563280240905859072
2) Un gato:
En 1996, el escultor colombiano Hernando Tejada, regaló un gato a la ciudad de Cali, pero no era un gato cualquiera. Se trató de una estatua de bronce de 4,50 metros de alto y de 3,5 toneladas de peso. El maestro tardó siete meses en crear su obra, la cual después viajó hasta Bogotá para ser fundida en bronce y fue regresada a Cali donde fue instalada en la ribera del río Cali, al costado de la avenida del río, en el oeste de la ciudad. Desde este momento, empezó a ser llamado el Gato del Río o el Gato de Tejada. Diez años después, la Cámara de Comercio tuvo una iniciativa de recuperación del monumento y sus alrededores. Ahí fue donde se creó el proyecto de Las Novias del Gato, donde artistas renombrados participaron en un concurso por encontrarle una novia al Gato, creando 15 estatuas gatunas las cuales fueron posteriormente exhibidas al lado del Gato del Río. En 2007 se eligió la ganadora, Fogata, y en la actualidad estas gatas y su gato se han convertido en un símbolo de Cali a nivel mundial y un foco turístico en la ciudad.
3) Muchas canciones:
A lo largo de su existencia, La Sucursal del Cielo ha sido inspiración de múltiples artistas y le han dedicado innumerables canciones. A continuación, algunas de las más famosas:
Cali Querido – Los Supremos (1971)
Los Supremos fue el primer grupo de Salsa caleña que grabó para el sello Fuentes en Medellín. Reunió a grandes músicos como Piper Pimienta, Fabio Espinoza Sr., Ovidio Billo Quiñonez y Alejandro Longa Pichirilo, dirigidos por José Doval Osorio. A ese Cali de los años setenta le dedicarían la canción Cali Queiroz, éxito que incluyeron en su álbum Atiza y Ataja.
No Hay Carretera – La Misma Gente (1989)
Esta orquesta vallecaucana con más de treinta años de carrera musical y liderada por los compositores y músicos palmiranos Jorge Iván Herrera y Jaime Henao, creó y desarrolló un estilo y un sonido propios de la ‘Salsa vallecaucana con sabor a pandebono’.
Amparo Arrebato – Richie Ray y Bobby Cruz (1971)
Después de sus éxitos Jala Jala, Ricardo Ray y Bobby Cruz grabaron para la compañía Alegre Records un segundo volumen que incluye Amparo Arrebato, dedicado a la bailarina caleña Amparo Ramos, quien cautivó con su singular estilo a este par de jóvenes que llegaron a Cali sin pensar que su ‘Sonido bestial’ se quedaría para siempre en el sentir de nuestra ciudad.
Me voy pa’ Cali – Óscar D´Leon
Óscar D’Leon y la Dimensión Latina, máximas figuras de la Salsa venezolana, aterrizaron en Cali en 1975, y desde entonces su éxitos resuenan con fuerza en esta ciudad. Con Llorarás, Longina, Contéstame y Siéntate ahí, este sonero nació para la Salsa. Y es precisamente en Cali donde florecen sus éxitos, muchos de los cuales son inolvidables para los bailadores
Cali Pachanguero – Grupo Niche
Si Ricardo Ray y Bobby Cruz dieron a conocer en Puerto Rico y Nueva York el nombre de Cali con su Amparo Arrebato, Jairo Varela y el Grupo Niche lo llevaron por todo el mundo salsero. Cali Pachanguero se convierte en la canción más importante grabada por una orquesta colombiana y nos ubica como un importante referente internacional en la cultura de la salsa.
Oiga, mire, vea – Guayacán Orquesta
No podía faltar el talento del compositor Nino Caicedo, con Alexis Lozano conforman otra llave musical que le ha dado muchos éxitos a la salsa con sabor chocoano. Guayacán, la Orquesta Madera de Colombia, sumó este número a una larga lista de éxitos bailadores.
4) Un monumento a una reina eterna:
Diego Pombo, artista plástico de Manizales que llama a Cali su hogar desde hace muchísimos años, nos dejó un regalo muy especial que forma parte del patrimonio cultural de la ciudad.
El monumento a la Reina de reinas, Jovita Feijóo, un personaje que se ganó el corazón de los caleños de todos los niveles socioeconómicos por su simpatía, gracia y elegancia a pesar de sus orígenes humildes. Fue tanta su popularidad que fue proclamada la Reina Eterna de Cali. Era de las primeras en reunirse con dirigentes que llegaban a la ciudad para compartirles las preocupaciones y peticiones del pueblo caleño, participaba en eventos públicos como la Feria de Cali, era recibida en el Club Colombia y el Club Campestre por la alta sociedad caleña y su funeral tuvo una asistencia multitudinaria. En 2007, el maestro Pombo le dio como regalo a Cali un homenaje a su reina eterna, plasmada en un monumento de 4 metros en fibra de vidrio, ubicada en el Parque de los Estudiantes, en la Calle 5ta entre Carrera 19 y 22.
Este parque fue creado para conmemorar a los 11 estudiantes de la Universidad Nacional asesinados en Bogotá en 1954 durante el gobierno de Gustavo Rojas Pinilla cuando recordaban y protestaban la muerte del primer estudiante asesinado por las fuerzas militares en 1929. Era el lugar idóneo para el monumento a este personaje que fue un icono de la clase trabajadora de Cali y también fue conocida como ‘Reina de los estudiantes’ por su muy recordado triunfo en 1968 en la Universidad del Valle, donde fue coronada como ‘Reina de la simpatía’ y también la Reina de la Facultad de Ingeniería Mecánica. En palabras de su creador, Diego Pombo: “Ella [el monumento] está soñando la Cali del futuro, la nueva Cali que va a renacer con Jovita para liderar procesos pedagógicos de arte y así reconciliar voluntades”.
Tomada de https://www.facebook.com/AlcaldiaDeCali/posts/2534806103232825/
5) Un récord Guinness:
El 28 de junio de 2020, Cali recibió su primer récord Guinness de parte de la Fundación Delirio y más de 120 mil participantes. Se trató del récord a El Mayor número de videos de personas bailando la misma canción. En la ciudad o en el exterior, miles de caleños y caleñas de corazón bailaron la canción ‘Cali Pachanguero’ y subieron su video a Facebook para participar en el record.
El evento, de nombre ‘En Cali Nos Llaman Baile’, fue un hito de esperanza y unión en medio de la pandemia de Covid-19. Los participantes se conectaron desde todo Colombia: Cali por supuesto, pero también Jamundí, Yumbo, Palmira, Bogotá, Tunja, Tenjo, Barranquilla, La Calera, Cartagena, Montería, Medellín, Popayán, entre muchos otros. También hubo participantes conectándose desde países como Ecuador, Honduras, Canadá, Perú, Francia, Estados Unidos y México entre otros.
Los escenarios de baile también fueron muy versátiles: algunos lo hicieron desde la casa, pero también bailaron desde la finca, la playa, desde lugares emblemáticos de las ciudades como los parques, las playas, la Estatua de la Libertad en Nueva York, el Estadio Olímpico Pascual Guerrero en Cali y muchos más.
Hubo participantes de todas las edades y de todas las pintas: algunos bailaron descalzos, otros con su mejor traje de gala, disfrazados, con camisetas de equipos de fútbol, y más.
La entonces directora de la Fundación Delirio, Andrea Buenaventura, manifestó que: “este era el momento ideal para lograr que Cali rompiera un récord mundial y se convirtiera en poseedor de un título de récord certificado por Guinness World Records, de decirle a Colombia y al mundo que sí, que ‘En Cali nos llaman baile’ y que se nos hincha el corazón porque somos la capital mundial de la salsa y el baile”.
Tomado de Revista Semana
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